Esclavo del Estado durante 171 días

Me llamo Juan Rodríguez. Soy mileurista. Hoy es 1 de enero y aunque es un día festivo, ya me siento desanimado. Mañana empezaré a trabajar para el Estado. Sin cobrar, día tras día, tediosamente, sin ilusión y así durante 171 días. Casi 6 meses. Soy un simple esclavo y no puedo quejarme. Me dicen que es por mi bien. Que hay que pagar la Sanidad, las Pensiones, las carreteras, los hospitales, y así una innumerable lista de servicios…

Estoy cansado. Llevo trabajando ya para el Estado 90 días. Y sin cobrar. Es mi obligación. Ya sabes, Hacienda somos todos. Pero veo pasar esos coches negros y sé quien va dentro. Ellos dicen que también son esclavos, pero una cosa nos diferencia. Yo no puedo decidir si he de trabajar 171 días sin cobrar o sólo 60 días. Eso lo hacen ellos. Pero, ¡yo qué sé de todo esto! Es mi obligación como ciudadano.

Ya queda poco. Ha pasado 141 días. ¡En apenas un mes podré cobrar y decidir que hacer con mi dinero! Habré cumplido y deberé sentirme orgulloso de contribuir. La verdad es que yo hubiera preferido comprarme una nevera nueva. Y cambiar la grifería del baño. Y ya puestos, comprarme ese ordenador, pues el que tengo renquea. ¡Pero qué se le va a hacer! ¡Lo primero es lo primero! Al menos eso dicen ellos, los que saben…

¡Al fin! ¡Mañana ya empezaré a trabajar para mí. El Estado me dará mi Carta de Libertad y lo que gane a partir de entonces será mío. ¡Todo mío, sólo mío! La verdad es que me siento un poco egoísta por lo que acabo de decir. Pero bueno, yo ya he cumplido con mi parte. 171 días son suficientes. Aunque se oyen rumores que apenas alcanzan para cubrir esos servicios que comenté al principio. Y yo me pregunto, ¿no habrá alguna forma de que paguemos menos y poder contar con aquellos servicios que cada uno necesite y haya decidido? Pero, bueno. ¡Qué sé yo! Al fin y al cabo, tan solo soy un mileurista…



Posdata: Me ha llegado mi carta de libertad y un resumen de mi aportación. No dejo de entristecerme cada vez que lo miro. Creo que acabaré tirándolo a la basura (el resumen, la Carta me ha costado mucho trabajo como para tirarla).



Enlace relacionado:
¿Cuánto dinero paga a Hacienda cada año? – Libertad Digital